viernes, 4 de mayo de 2007

Era mi tercera practica, yo estaba bastante contento porque el colegio que me tocaba era el de la esquina de mí casa, “me dije” todo será mas fácil, pero al correr de los días y sobre todo en las dos semanas intensivas comenzó lo que nunca pensé pasaría, a muchos de los niños del colegio yo los conocía y también a sus papas, entonces todos me saludaban y yo me sentía muy a gusto pero cuando empezaron las tareas para la casa, comenzó a sonar el timbre de la mía también el teléfono y eso me descoloco. Mas que agradarme no me gusto para nada y me cuestione fuertemente si era bueno trabajar con gente conocida, de cierta manera también pensé que las tareas que yo envié si eran importantes para los niños y sus padres y por eso era el interés de preguntar e investigar.

Como reflexión puedo decir que trabajar con personas cercanas o conocidas es un poco mas difícil ya que su impresión no es la misma de una que te mira por primera vez, sentí que no tenia privacidad, cuando salía a la calle a comprar o simplemente a fumar, mi marcos interno no se sentía pleno, las personas te PRE juician y te ven como un ser intachable, en resumen me sentí raro en mi propio barrio.



¿Es bueno trabajar con personas conocidas?

¿El profesor tiene que atender en su domicilio a los apoderados?

¿El profesor es dentro y fuera del establecimiento?




Marcos Cerda

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